Qué ver en Lekeitio

Lekeitio es un municipio costero vizcaíno situado en la comarca de Markina.Se erige en la ensenada natural de la desembocadura del río Lea, protegida por la isla Garraitz. Limita al norte con el mar Cantábrico, al sur con Amoroto, al este con Mendeja y al oeste con Ispaster. Ocupa una superficie de 1,9 Km2.
Geográficamente la abrigan los montes Lumentxa, conocidos por el Calvario, y Otoio ambos son lugares estratégicos, desde donde se contempla una de las panorámicas más hermosas del Cantábrico.

Esta Villa Medieval y marinera fue fundada en el año 1325 por Doña María Díaz de Haro, Señora de Vizcaya, quién otorgó la carta puebla, que concedía a la pequeña población le título de Villa, garantizándole ciertos privilegios jurídicos, comerciales, fiscales, militares e incluso religiosos. a partir de esa época ya se orientó hacia la tradición marinera. Así lo acredita la chalupa con remos y la ballena que figuran en su blasón. Fueron siete las puertas de acceso abiertas a través de la muralla. La villa también ha sido y es actualmente lugar de descanso, especialmente estival. La eligieron como lugar de reposo Isabel II de España y la emperatriz austro-húngara Zita cuando fue destituida tras la Primera Guerra Mundial.

Aún conserva algún pequeño tramo de sus murallas aunque han desaparecido las 5 puertas que antaño tenía. Los primeros datos de ocupación están documentados en la cueva de Lumentza que, con Santimamiñe, es uno de los yacimientos vizcaínos con un espectro cultural más completo desde el Paleolítico Superior hasta la Romanización, donde se han encontrado vestigios del hombre prehistórico recolector de moluscos así como restos de monedas y utensilios romanos

Económicamente Lekeitio siempre basó su economía en el mar, convirtiéndose en un importante puerto pesquero y comercial que conectaba la península con Flandes. Actualmente alterna este sistema de vida basado en la pesca y las industrias como conserveras y astilleros.

El mar forma en Lekeitio una pequeña bahía, en cuyo centro está bien situada, protegiéndola, la isla de San Nicolás. Su casco urbano lo forman dos zonas muy separadas; una zona consta de dos cantones y cuatro calles medievales, estrechas, empinadas y paralelas llamadas Apalloa, Azpiri, Intxaurrondo y Bergara. Es la parte más antigua del pueblo. El resto se edificó al lado de las calzadas que venían de Guipúzcoa, Markina y Gernika siendo una extensión del casco viejo.

Destacar el casco viejo que se asoma por uno de sus lados al puerto pesquero, lleno de colorido y de animación. Toda la zona está bien surtida de tabernas y restaurantes. Pero además de tener una bella arquitectura urbana, Lekeitio tiene dos bonitas playas. La primera, Isuntza, es pequeña y está situada prácticamente en la misma villa. La segunda, Karraspio, un poco más distante, es amplia, muy bella y está bien dotada de servicios playeros. En marea baja se puede pasar de una a otra playa.

Su patrimonio es rico desde el punto de vista arquitectónico cabe destacar la iglesia de Santa María de la Asunción, cuyos orígenes datan del año 720; la ermita del Santo Cristo de la Piedad; la Torre Turpin; el Ayuntamiento, que data del siglo XVIII; el Palacete de Arostegi del siglo XIX; el Palacio Uriarte, el Palacio de Urribarri, Palacio de los Adán de Yarza; la Casa de los Salinas; la ermita de San Nicolás; los restos de muralla medieval; la Cueva de Lumentza con restos prehistóricos; la isla Garraitz y el faro de Santa Catalina entre otros.

Lekeitio es actualmente un lugar idóneo como residencia de vacaciones, lo que ha provocado un crecimiento turístico muy importante; son muchos los visitantes que eligen Lekeitio como lugar de vacaciones, aquí podremos disfrutar de los deportes náuticos, de sus playas, su rica gastronomía y todo en un marco natural incomparable.

El día de San Pedro, tras la Misa Mayor, podemos ver la procesión de San Pedro desde la Iglesia parroquial hasta el Puerto con la kilinkala y el baile de la Kaxarranka.