Qué ver en Curiel De Duero

Municipio perteneciente al antiguo partido judicial de Peñafiel. Se encuentra situado a unos 55 o 60 kilómetros de Valladolid, y a unos 5 de Peñafiel. Las condiciones de los alrededores de Curiel permiten la posibilidad para practicar Turismo Rural, turismo verde, cicloturismo, senderismo o turismo a caballo.

El nombre de Curiel está citado en documentos históricos hacia el año 1065, año en que el municipio pertenecía al obispado de Palencia. Primero fue la reina Doña Berenguela y después fue Doña Violante quienes figuraron como señoras de la villa, villa que encabezaba una Comunidad de Villa y Tierra al frente de diversos pueblos. Ya en la Edad Media, el pueblo sirvió como enclave defensivo cuando el Duero era frontera entre los Reinos Cristianos y el reino Musulmán. El municipio también sirvió como refugio para diversos caballeros durante las guerras entre Pedro I y Enrique de Trastámara. También sirvió el pueblo como residencia para Alfonso XI.

En Curiel encontramos múltiples lugares de interés. Podemos visitar los restos de la antigua muralla. Antiguamente tres órdenes de muralla conformaban el recinto defensivo del pueblo. De las cuatro puertas que servían de acceso sólo queda una, en el barrio del Calvario. También se pueden visitar los restos del Castillo-Palacio del siglo XV, construido por Don Lope de Stúñiga en 1410. En tiempos sirvió como fortaleza defensiva, pero el paso del tiempo sólo ha mantenido intacta la estructura exterior, ya que el interior está totalmente vacío. Otros lugares dignos de visitar son la Iglesia Parroquial de Santa María, edificio e estilo gótico-mudéjar construido en el siglo XV. La construcción se llevó a cabo con excelente piedra de cantera, y el edificio consta de tres naves que se construyeron siguiendo el sistema de grandes arcadas mudéjares. En el interior destaca el hecho de que en la viga que sostiene el coro hay pinturas de escenas evangélicas, lo que se considera una obra insólita para el estilo mudéjar utilizado en el artesonado. Hay por último otros dos lugares que merecen que se les eche una ojeada. En primer lugar tenemos la ermita, un edificio de piedra humilde y sin ningún tipo de pretensión, y que en su interior conserva un retablo barroco del siglo XVIII con una escultura de Cristo del siglo XVI. En segundo lugar también merece la pena visitar el rollo del pueblo, que por estar situado a la entrada del pueblo más que rollo parece picota.

Hay numerosas fiestas a lo largo del año en Curiel. El 3 de mayo se celebran las fiestas de la Cruz, que casi llegan a enlazar con la romería de San Isidro. El primer fin de semana de agosto se celebra la fiesta del Cristo Resucitado, y el primer fin de semana de octubre se celebra la fiesta de la vendimia