Qué ver en Cerdedo

El nombre de Cerdedo viene, según Millán González, de la palabra cerasetun (cerezos). En esta tierra habitaron las gentes de los dólmenes y los castros y, desde los albores de la cristianización en Galicia, formó parte de la Terra de Montes.
El acontecimiento de más relieve en su historia fue la obligación del pago del diezmo que impuso en 1255 el rey Alfonso X, y que empobreció aún más una tierra castigada en aquellos días. La presión sobre los campesinos se mantuvo hasta que, en 1809, José Bonaparte anuló esta obligación a una comarca que, dos años después, en 1811, fue dividida en cinco distritos, tras la liquidación de las jurisdicciones especiales que hicieron las Cortes de Cádiz y que vieron el nacimiento de la provincia de Galicia. La Terra de Montes fue dividida, de esta manera, en los municipios de Beariz, Cerdedo, Duasiglesias, Pardesoa y Quireza.
Ríos y montes salpican la geografía de Cerdedo, un ayuntamiento que hizo de la agricultura y la ganadería sus medios de supervivencia. Maíz, centeno, patatas y hortalizas son algunos de los productos que da la tierra, que también tiene prados, robledales, pinos, eucaliptos, castaños y abedules, que mantienen una importante industria maderera. Pero la principal fuente de ingresos de Cerdedo procede de la ganadería, principalmente de la leche, los conejos de corral, los cerdos, los caballos, las ovejas y las aves.
El Padre Sarmiento, Xosé Otero Espansadín o Pedro de Monteagudo son algunos de los nombres ilustres que dio Cerdedo a la historia.