Qué ver en Hermedes De Cerrato
En el extremo sudeste de los Valles de Cerrato, a 45 km de Palencia y cerca de la provincia de Valladolid, la villa de Hérmedes de Cerrato incluye en su término el despoblado de San Sebastián, y se asienta sobre una planicie surcada por los arroyos Maderazo, Yesero, Maderón y Valsalinero.
Numerosos caminos recorren el término y conducen a los distintos pagos de la villa. También atraviesa el municipio la Cañada Real burgalesa. De su flora cabe destacar la abundancia de chopos, pinos y encinas, además de árboles frutales. La fauna es fundamentalmente cinegética, con tejones, raposos, liebres, palomas y otras aves autóctonas. Predomina la agricultura de cereales, girasoles y remolacha azucarera, así como el ganado lanar y la cría de aves y cerdos para el consumo particular.
Hérmedes de Cerrato significa “lugar de las ermitas en el Cerrato”, nombre que descubre el origen mozárabe del lugar, ya que en el término existe una ermita, Monumento de Interés Nacional, construida en el estilo de los árabes que quedaron en tierras castellanas tras la Reconquista, con planta rectangular y un notable arco de entrada. También es mozárabe la curiosa pila bautismal esculpida en una columna. En el siglo XI perteneció a la Orden de San Benito, que fundó la Abadía de Hérmedes, que no se ha conservado. En el s. XIV, Hérmedes de Cerrato y San Sebastián eran lugares de abadengo, el primero dependiente de la Abadía de Hérmedes y el segundo de la Abadía de Husillos. Hoy se celebran fiestas patronales en honor de la Natividad de la Virgen, el 8 de septiembre.
