Qué ver en Elgorriaga

Poblacion situada en la comarca de Malerreka en los pirineos Atlánticos, pueblo Navarro con grandes y señoriales casas. Situado en la falda del Monte Mendaur, la distribución de sus calles de losa roja, y sus casas de piedra y madera presentan la arquitectura típica de la zona norte de Navarra.

Lugar ideal para pasar unos dias de descanso, ya que se trata de un pueblo tranquilo, ubicado en un marco natural incomparable. Podemos acceder por la carretera comarcal NA-170, Leitza - Doneztebe/Santesteban.

Caracterizado por su clima Atlántico, con inviernos templados y húmedos y veranos suaves y agradables, y por el rio Escurra, que baña sus merindades, en donde podemos practicar el difícil arte de la pesca. En sus bosques predomina principalmente el haya y roble, pero también podemos encontrar castaño, fresno, acacia y pino de repoblación.

Sus origenes se remontan al siglo XV, fue un pueblo muy castigado por la inquisición en juicios por brujería anteriores a los Auto de Fe de Logroño en 1610.Antiguamente se afirmaba que sus tierras eran curativas, por esta razon se llega a creer que el pueblo fue edificado sobre un asentamiento de infectados de sarampión.

Su principal fuente de ingresos es la agricultura y gananderia, se ha pasado de las pequeñas a reducírsela actividad a unas pocas familias.
Actualmente existen en el pueblo serrerías, carpintería, taller de artesanía en forja así como casas rurales y restaurante.

El Balneario de Elgorriaga ofrece la suma de los mejores medios para que ese agua tan especial se ponga al servicio de un turismo de salud y naturaleza diferentes.

En cuanto a construcciones arquiectonicas y monumentos nombrar el
Puente, medieval, con un único ojo que se encuentra sobre el río
Ezkurra. La Iglesia de S. Pedro Apóstol, de piedra y con una unica nave, conserva un retablo central del siglo XII y dos grandes lienzos con la figura de San Fermín y San Francisco de la 2ª mitad del siglo XII. Los lavaderos, que han estado en uso hasta los años 60. y por ultimo el Molino de agua de única tolva, donde se molía el maiz para consumo ganadero y humano.