Qué ver en Campos

Hasta hace pocos años, Campos vivió a espaldas del turismo. La rentabilidad del sector primario fue, posiblemente, una de las principales causas. Este municipio situado al sur ocupa una extensión de 147,90 kilómetros cuadrados y tiene nueve km² de costa, con los nucleos de ses Covetes, sa Rápita, es Palmer, sa Sorda, sa Vinyola y can Mandana.
En su interior, Campos limita con los municipios de Porreras, Llucmajor, Felanitx, ses Salines y Santanyí. Conserva el aspecto de una población rural que durante los últimos años, no ha sufrido grandes modificaciones. Su clima es de los mas áridos de Mallorca y su vegetación se localiza, principalmente en la costa y en es Solobrar. El monte bajo y el pinar ocupan las dunas y arenales del litoral. Pero son los molinos y las huertas, cada vez menos frecuentes, uno de los elementos mas característicos del municipio, formado por una gran alfombra de colores variados, que van desde los marrones del interior, pasando por los verdes, hasta llegar a los azules del Solobrar y las salinas.
El término es practicamente llano y en su interior la máxima altura no supera los 100 metros. En su zona mas meridional destaca es Salobrar, la segunda laguna de Mallorca, después de s´Albufera. Con sus dos km² recibe las aguas del mar y de los torrentes de la cuenca de Campos. En las proximidades del Solobrar destacan las salinas y el balneario de San Juan de la Font Santa, con las únicas aguas termales de Mallorca.
En cuanto a restos prehistóricos, en la carretera de Santanyí está el Talaiot de Son Toni Amer. En la zona de Son Fadrí se localizaron restos de una necrópolis romana, de la que hoy, solo quedan unas fotografias.

El pueblo se levantó a partir del año 1300, a pesar que los restos romanos que hay en su costa nos indican que existió un núcleo urbano anteriormente. Su primera iglesia fue la de Sant Blai, que se construyó en 1248 y hoy, todavia conserva el aspecto gótico inicial.
En el término, antiguamente vulnerable a los ataques de los corsarios, resaltan las torres de defensa de sa Torre, Torre de Son Cosmet, Torre de Can Bragues, Torre d´en Catlar, Torre de Can Dameto, Torre de Can Francina y Torre de Can Cos, que actualmente forma parte de las dependencias municipales.

El color de la fachada el ayuntamiento, al igual que las mayoria de las casas, es rojizo. El suelo del interior es de sedimentos de tierra rubia, conocida popularmente como "call vermell".