Qué ver en Valencia De Alcantara

El término municipal se desarrolla en torno a los 400 m. de altitud, en una rampa ondulada que, desde las sierras centrales extremeñas se dirige hacia el río Séver, en la frontera portuguesa.

La mayor parte del territorio municipal está drenado por la red del Tajo, presidida por el Séver.

El clima presenta características mediterráneas con indudables influencias atlánticas. La precipitación media anual supera los 600 mm. que se recogen del otoño a la primavera. El mes más lluvioso es marzo. Las temperaturas son calurosas en verano, con 24,5ºC en julio, y suaves en invierno (5,9ºC en diciembre).

A la bonanza climática se le agregan, como factores favorables al poblamiento, unas excelentes condiciones para la defensa y magníficas aptitudes para el pastoreo sobre las verdes praderas que unen las sierras y los riveros.

En la estructura de la población, según su actividad, destaca la importancia del sector agrario, a pesar de tratarse de una indiscutida cabecera comarcal, con el 38 por 100 de la población activa. Bien es cierto que el sector terciario, o servicios, ocupa la primera posición, con el 42,8 por 100. La construcción alcanza un valor elevado, con el 11,9, mientras que la industria apenas está representada con un 7,3. Todo ello dentro de un ambiente de media-baja actividad, con el 33,2 por 100 de la población.

La agricultura pone en explotación 57.714 de las 59.510 ha. del municipio, dedicando el 36,4 por 100 a superficie arbolada; el 35,2 por 100 a pastizales; el 7,7 por 100 a cereales de secano; y se considera improductivo un 12,7 por 100. La superficie agraria se encuentra presidida por las explotaciones en régimen de propiedad. Las explotaciones menores de 5 ha. alcanzan el 85,1 por 100, mientras que las mayores de 500 ha. sólo representan el 1,6 por 100.

Desde la perspectiva económica presenta mayor interés la ganadería en régimen extensivo, con 7.764 Unidades de Ganado Mayor, entre las que destaca el vacuno (4.552), seguido del porcino (1.477), ovino (1.285) y caprino (450).

La historia de Valencia de Alcántara se ha visto muy condicionada por su paradigma de frontera entre los dos reinos ibéricos. Las primeras fuentes fiables que hablan de su existencia parten del año 1221, fecha en la que sería conquistada por los caballeros de la orden de S. Julián de Pereiro, conocida posteriormente como Orden de Alcántara.

Su carácter de frontera supuso una notable presión sobre esta localidad, que sería conquistada por los portugueses en 1664, siendo restituida por la paz de 1698.

A comienzos del s. XVIII, en el transcurso de la guerra de Sucesión, registró múltiples agresiones que se concretan en sacas y levas militares, aumentos de la presión fiscal, la obligación de alojar y soportar a contingentes militares, la requisa de alimentos y ganado, etc. Finalmente, sería conquistada en 1705 y restituida a España en 1715.

Durante la Guerra de la Independencia, esta localidad se destacó por su lucha contra el ejército invasor francés. A finales de septiembre de 1810 se establecieron allí, por disposición del marqués de la Romana, la Junta Suprema de Extremadura y demás autoridades que residían en Badajoz, en previsión de un posible asedio por parte de los franceses. La Junta, al poco tiempo de instalarse allí, creó un órgano de difusión de las ideas independentistas llamado Gaceta de Extremadura, de periodicidad semanal. Sin embargo las diversas circunstancias críticas del momento y los excesivos gastos que ocasionaban obligaron a la Junta a prescindir de ella. El marqués de Monsalud la tomó entonces a su cargo y sobrevivió a la propia Junta.

El 11 de marzo de 1811, los franceses entraron en Badajoz, enseguida caería en manos de Latour-Maubourg Valencia de Alcántara, que no se hallaba en condiciones de oponer eficaz resistencia. Por el mes de abril esta plaza fue recuperada, tras ser abandonada por los franceses, por el general Castaños que se encargó del mando de los restos del 5º ejército de Extremadura.

En agosto de 1812, el marqués de Monsalud, comenzó a organizar desde esta localidad los preparativos para la elección de diputados a Cortes y provinciales, pero la llegada a Badajoz del nuevo capitán general, marqués de Palacio, determinó que las elecciones se celebraran en la capital pacense.

El vecindario de Valencia de Alcántara expresó su adhesión y felicitación por el final de la ardua tarea legislativa de las Cortes de Cádiz, que se vieron coronadas por el éxito al aprovarse la Constitución de 1812.

Valencia de Alcántara sería un importante foco del carlismo, contando con partidarios como Fernando Peñaranda y Juan Amarilla, vecinos influyentes de esta localidad.