Qué ver en Santa Ines

Unos 39 kilómetros separan al pueblo de Burgos, una cercanía que hace que muchos viajeros opten por vivir en ella aunque tengan que viajar todos los días hasta la ciudad para trabajar. Actualmente cuenta con una población de alrededor 160 habitantes que residen en un único núcleo poblacional: Santa Inés.

A pesar de su pequeño tamaño, todavía guarda en pie muchos monumentos que lo convirtieron en uno de los municipios más relevantes de Burgos. La Iglesia es uno de los lugares que más atracción despierta entre los visitantes. En su interior se guardan muchos materiales históricos, tales como la pila bautismal o el retablo mayor. Su diseño lo acerca al estilo prechurrigueresco y en él están las imágenes de Santa Inés, Santa Catalina y la Asunción.

Aunque el valor económico e histórico de lo que hay en su interior es incontable, el que hay en la actualidad podría serlo aún más si no hubiera desaparecido uno de los retablos en 1700 cuando se procedía a dorar la obra para que recuperara todo su esplendor.

Una de la actividades que más llama la atención a los viajeros que optan por este municipio para pasar unos días rurales es la gran afición que hay por la recogida de setas. Y es que en sus bosques habitan todo tipo de ellas: champiñón, seta de mango azul, crispilla, seta de cardo o el níscalo son un ejemplo.