Qué ver en Senes

Senés es un municipio de la provincia de Almería. Es un pueblo muy típico de esta sierra, pequeño, con casas encaladas muy apretadas, de calles estrechas y empinadas donde se respira verdadera paz, no en vano es elegido por muchos "huídos de la urbe" para pasar vacaciones o fines de semana.

Este paraíso tiene como frontera la carretera que va hacia Tabernas.
Este pueblo destaca sobre todo por un blanco impoluto sobre el verde claro del monte en que se asienta. Proliferan las casas de campo con pequeñas parcelas enforma de terrazas donde veremos sin duda cultivos, los habitantes de esta tierra se afanan duramente por conseguir los frutos, que en ocasiones son casi milagrosos. Sin duda este pueblo nos dejará perplejos por su belleza.

El origen árabe, junto con una serie de características en su tipología urbanística como es la utilización de lajas de pizarra en construcción y principalmente en las cubiertas, hacen de Senés un lugar especial dentro del conjunto de los pequeños pueblos de Filabres.

Las construcciones son de piedra y tierra, de poca altura y se pueden ver en las paredes algunas inscripciones árabes, restos de cerámica y las entradas de los silos que habría en los patios de las casas. Se han encontrado restos de cerámica, algunos enterramientos y la presencia de una posible fundición de hierro.

También cerca del pueblo, han aparecido grabados rupestres en la parte estrecha y colgante de la roca; hay un nombre de persona y otros trazos de origen árabe.

La economía de Senés es predominantemente rural. Tradicionalmente cultivos de secano, regadío y ganadería se han complementado. Las tierras de secano se destinaban principalmente al cultivo de cebada, centeno y trigo, aunque también aparecían los morales, algarrobos o almendros, mientras que en las tierras de regadío producían hortalizas para el consumo familiar, patatas y maíz.

Tenemos que desatacar la fortaleza medieval, que cubre una superficie de 6.000 m2. Fue construida en el siglo XII y tiene un carácter estrictamente defensivo; la muralla es de esquisto y tierra. Se levanta en un alto peñón, cuyo profundo barranco abre espacio a la vega, y las construcciones interiores son escasas.

La iglesia parroquial es de estilo mudéjar, reparada después de la expulsión de los moriscos en el siglo XVI con la llegada de los repobladores, situada en la plaza y presidiendo todos los actos sociales del pueblo; una nave central y capilla lateral albergan imágenes y complementos de gran valor artístico y sentimental para los hijos de Senés.