Qué ver en Denia

Dénia es una ciudad llena de vida, de color y de alegría mediterránea, y eso se refleja en sus calles y en sus gentes. Consta de unos 30.000 habitantes, que además de éstos Dénia es una ciudad de privilegio para residentes y extranjeros, puesto que son muchos y de variadas nacionalidades los que han elegido por su climatología con una media de 19º anual y por poseer todo tipo de servicios y comodidades de los que dispone una gran capital, pero acogedora como un pueblo. Hay que añadir que durante la época de verano Dénia triplica su número de habitantes.
Dentro de los servicios que ofrece Dénia, mencionar que posee una gran oferta comercial. En el casco urbano encontraremos paseando por las calles Marqués de Campo, Paseo de Saladar y otras, una amplia gama de artículos de moda (calzado, artesanía,...) contando en algunas de ellas con prestigiosas firmas de la moda actual.

No hay que olvidar, que además de los citados negocios Dénia dispone de un mercadillo de puestos ambulantes, donde se puede encontrar desde una cómoda del pasado siglo hasta lo último en música pop, lo encontrará todos los lunes en el recinto de Torrequemada. Pero si lo que desea comprar son alimentos frescos, tendrá que dirigirse a nuestro querido Mercado Municipal.

Cabe destacar que Dénia como capital de comarca que es, dispone de un Hospital Comarcal, además de clínicas y ambulancias privadas, así como los servicios de la Cruz Roja Española.

También en Dénia encontrará a disposición de todos, Juzgados, Registro de la Propiedad, Delegación de la Agencia Tributaria, Notaría,..., además de los servicios municipales como son el archivo municipal, biblioteca, colegios, institutos, casa de cultura, U.N.E.D. y Tourist-Info Dénia.

Desde el 27 de Septiembre de 1996 (Día del Hermanamiento) Dénia se encuentra hermanada con la ciudad francesa de Cholet, la cual cuenta con 57.000 habitantes y está situada en Anjou.

Los orígenes de la ciudad de Dénia propiamente dicha se remontan a la fundación de una colonia griega de nombre Hemeroskopeion, aunque en época pre-romana existieron emplazamientos íberos en la zona del Montgó.

La aventura urbana de la ciudad arranca en el s.III a.c. en el que se funda Dianium por los romanos. Factor clave de esta época es el puerto por el que se exportaba toda la producción con destino a la Urbe. En los siglos siguientes hasta la llegada de los musulmanes debe remarcarse la existencia de una sede episcopal en Dénia.
En torno al 713 los musulmanes toman control de la plaza. En el año 1013 se declara Taifa independiente del poder de Córdoba acuñando moneda propia, status que mantuvo hasta el 1076. Culturalmente alcanzó un alto nivel dentro de Al-Andalus, pudiéndose mencionar figuras de la talla de Ibn Al-Labbana, Ibn Sida, Abu-S-Salt y Ad-Dani (el de Dénia).

Dénia fue conquistada en el año de 1244 bajo el reinado de Jaume I por Pere Eiximen Carròs. En el s. XV, es erigida en marquesado en manos de los Sandoval y Rojas. El quinto de estos marqueses, el "Duque de Lerma", fue valido de Felipe III, monarca que le concedió el título de ciudad en 1612.

Durante la Guerra de Sucesión, toma partido por el Archiduque Carlos, pretendiente al trono de la Casa de Austria. Dénia es la primera ciudad que le proclama rey legítimo de España en el 17 de Agosto de 1705. Después de tres sitios fue tomado el castillo el 17 de noviembre de 1708. Las consecuencias de la guerra fueron devastadoras en materia demográfica y económica.

A lo largo del s. XVIII se produce una importante recuperación que continúa durante el siglo siguiente. Es a partir del último tercio de éste cuando el monocultivo de la uva pasa ejerce como motor de una fuerte expansión que determina la construcción de importantes infraestructuras como las líneas de ferrocarril Carcaixent-Dénia, Alicante-Dénia, fábrica de gas, consulado, telégrafo, etc.

En los primeros años del s.XX el ataque de la plaga de la filoxera a las cepas y la competencia de otros mercados determinó el comienzo de un declive económico lento y prolongado en el tiempo. La sociedad casi exclusivamente rural, si bien subsisten industrias metálicas relacionadas con la fabricación de juguetes, se mantuvo casi inalterable hasta principio de los años 60, momento en el que se desarrolla fuertemente la actividad turística que constituye el principal motor económico actual.