Opinión de Juan, Elen Y Familia sobre Posada Abuela Fidela

Julio 2008

Buscábamos un lugar donde hacer noche a mitad de un viaje de 1000 kms. Al final, a través de esta web, por precio y situación, decidimos ir a la Posada Abuela Fidela. Nuestra sorpresa ha sido de lo más grata. Una casa rural que conserva su encanto a pueblo. Un pueblo donde por las noches es posible escuchar grillos y oír cantar al gallo por la mañana. Un pueblo precioso. Y Miguel, el dueño de la casa, que se desvive por llevar su negocio adelante sin renunciar a aquellos detalles que gustan a los que buscan la esencia del auténtico turismo rural. Lo dicho, íbamos buscando tan sólo un lugar donde dormir (somos familia numerosa) y, al final, repetimos a la vuelta del viaje y nos hemos quedado con las ganas de pasar unos cuantos días más. Perfectamente recomendable. Un saludo a Miguel, a Nacho (su hijo) y suerte.