Estuvimos el pasado fin de semana en esta posada de Cantabria. A pesar del mal tiempo, lo pasamos genial. Visitamos las cuevas del Soplao, Santillana del Mar y Suanes.
La posada es francamente bonita, tienen un jardin, del que no pudimos visitar por la lluvia, que es precioso.
La habitación que nos toco estaba en el ático de la casa, aunque hay varias escaleras, no importa, ya que esta era preciosa, decorada con muy buen gusto y muy amplia.
Además tenia un pequeño balcón con vistas impresionantes.
El viernes cenamos en el restaurante de la posada, tienen una carta muy variada, y ademas un men degustación con productos de Cantabria, por solo 35 € que es una pasada. La comida muy buena y el servicio y la atención de todo el personal fue inmejorable, nos hicieron sentir como en casa.
A pesar de ser una posada ofrece unos servicios de un hotel de ****. Deberian tomar nota algunos establecimientos de categoria superior.
Resumiendo, un sitio para recomendar y nosotros desde luego que repetiremos la experiencia
La posada es francamente bonita, tienen un jardin, del que no pudimos visitar por la lluvia, que es precioso.
La habitación que nos toco estaba en el ático de la casa, aunque hay varias escaleras, no importa, ya que esta era preciosa, decorada con muy buen gusto y muy amplia.
Además tenia un pequeño balcón con vistas impresionantes.
El viernes cenamos en el restaurante de la posada, tienen una carta muy variada, y ademas un men degustación con productos de Cantabria, por solo 35 € que es una pasada. La comida muy buena y el servicio y la atención de todo el personal fue inmejorable, nos hicieron sentir como en casa.
A pesar de ser una posada ofrece unos servicios de un hotel de ****. Deberian tomar nota algunos establecimientos de categoria superior.
Resumiendo, un sitio para recomendar y nosotros desde luego que repetiremos la experiencia