Estuve este fin de semana y fue una experienca increible. El trato del personal es inmejorable, nos informaron de todos los lugares que podíamos visitar, siempre nos atendían con una sonrisa y buenas palabras y siempre están pendientes de que no te falte nada como si estubieras en tu propia casa. Es un lugar precioso en el que encontraras la tranquilidad necesaria para desconectar de tu día a día. Pudimos disfrutar de la piscina durante toda la tarde. Las habitaciones tienen una decoración sencilla pero son muy acogedoras y bonitas. La cena estuvo deliciosa y los desayunos son muy completos y abundantes.
En verano repetiremos con la familia y serán unas vacaciones inolvidable!!!!
En verano repetiremos con la familia y serán unas vacaciones inolvidable!!!!