Un lugar acogedor y tranquilo para descansar y recatgar pilas. Le falta que el restaurante esté abierto pero te puedes organizar bien con lo que hay en la cabaña.
Recomendable para parejas, familias y personas que quieran viajar con sus mascotas.
Un entorno muy agradable para familias con hijos pequeños. Se agradece mucho la piscina climatizada y la casa es confortable. Por fuera hay espacios naturales amplios para que los niños jueguen y corran.
En la web ofrecían multitud de servicios (salas de juegos, tiro con arco, paseos a caballo) y un largo etcétera que después estaban cerrados.
Lo único que funcionaba era la piscina climatizada, pero cuando oscurecia nadie daba las luces y aquello permanecía oscuro.
Nos cobró la estancia la señora de la limpieza sin darnos ningún recibo. Estuvimos completamente solos y nos sentimos abandonados y tirados en medio de la nada, sin personal presente, ni conexión por correo electrónico y con un número de teléfono que era un contestador que decía que estaban de vacaciones y que no podía atender.
Cuando llegamos no nos esperaban. No sabían que llegábamos. La cabaña estaba totalmente helada.
Los dueños no aparecieron por allí durante la estancia. Solo la señora de la limpieza, de modo que cuando se iba a su casa allí no se quedaba absolutamente nadie.
Muy bien el sitio.las cabañas muy bien pero lo mejor es la cuadrilla del bar y las tortillas de la jefa muy pero que muy recomendables!!!
En definitiva una estancia muy comoda.gracias
Es un sitio ideal para ir con niños. Pasamos un fin de semana estupendo, en el recinto hay de todo, y puedes comer por un precio muy económico. La piscina climatizada esta muy bien y puedes hacer uso de la misma cuando te apetezca.
En las cabañas la calefacción esta alta, por lo que no hay miedo de pasar frío.
Como pega, sólo decir que la tele es muy pequeña.
Todo estaba muy limpio, había suficientes enseres para poder cocinar.
Nos alojamos unos días de agosto en este establecimiento, en general todo bien. Buscábamos tranquilidad y allí la encontramos. Las cabañas muy bien, limpias y bien equipadas. Las zonas ajardinadas bien y sitio para que los niños jugaran sin peligro pues es un recinto cerrado. Lo único negativo que encontramos fue el restaurante y la ubicación. El restaurante no lo aconsejo, la comida era mala y el establecimiento necesita una buena limpieza y referente a la situación esta en medio de la nada, si quieres ver algo tienes que coger bastante carretera, pero bueno el sitio, el entorno y las cabañas valen la pena.
Un sitio para relajarse y desconectar del mundo. Las cabañas están muy bien habilitadas. La finca es espectacular (Piscina cubierta, sala de juegos, gimnasio al aire libre)
el trato es excelente. Pasamos un fin de semana estupendo.
Recomendable para parejas, familias y personas que quieran viajar con sus mascotas.